Los tres niños, encerrados durante casi cuatro años por sus padres en una casa de Oviedo tendrán que ser sometidos a una valoración psicológica "en profundidad". La primera evaluación revela que los tres menores están "físicamente perfectos". Lo prioritario, según las autoridades es reforzar la confianza de los niños, que solo hablan inglés, para posteriormente realizar una valoración de su estado mental.

La titular de la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Principado, Marta del Arco, ha informado que los dos gemelos de 8 años y el otro niño de 10 años, están "bien" y "tranquilos" e "interrelacionándose con el entorno más cercano" en el centro de menores de Oviedo en el que residen de manera temporal.

Sus padres, un ciudadano alemán de 53 años y la madre, de 48 con doble nacionalidad, alemana y estadounidense, permanecen en prisión provisional después de ser arrestados el pasado lunes, después de que las autoridades acudieran a la vivienda en la que residía la familia gracias a una denuncia vecinal.

La familia residía en un chalet en la zona rural de la capital asturiana, donde los niños estaban sin escolarizar y estaban encerrados en el interior de la vivienda rodeados de excrementos, basura y medicamentos acumulados. No podían salir ni al patio de la casa y la investigación abierta trata de aclarar si los progenitores sufrían algún trastorno mental que los llevara a someter a sus hijos a este aislamiento.

La consejera de Derechos Sociales de Oviedo ha explicado que lo "prioritario" es que los niños se "sientan seguros" en su nuevo entorno vital para posteriormente puedan ser sometidos a la valoración psicológica.

"Próximamente, habrá una valoración psicológica en profundidad, pero, de momento, un poco de calma y que ganen confianza en las gentes que les rodean. Los niños hablan inglés solamente y ahora mismo lo que estamos intentando es que ganen confianza en el entorno", ha añadido.

El Gobierno del Principado se personará en la causa penal abierta contra sus padres al asumir la administración autonómica la tutela de los menores, después de que el Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo acordase la suspensión de la patria potestad y de la guardia custodia tras la apertura de diligencias abiertas, en principio, por violencia doméstica, con maltrato habitual psicológico y abandono de menores, pudiendo haber incurrido también en un delito de detención ilegal.

La administración regional continúa buscando a familiares de los tres niños, un proceso que no puede desarrollar en solitario y que precisa de la colaboración de "otros estamentos, habida cuenta de que los menores no son de nacionalidad española". "Estamos en un proceso administrativo y de alta coordinación con otros estamentos para asegurar si los niños tienen familiares en Alemania o donde sea", ha subrayado. 

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