Declaración Renta 2025: ¿Cuáles son las obligaciones fiscales de los freelancers?
Hay que darse de alta en Hacienda y Seguridad Social, y además de comenzar a pagar la cuota de autónomo
A esto hay que añadir los impuestos relacionados con el rendimiento del trabajo
Los gastos que puedes deducirte si eres autónomo y teletrabajas
MadridLa figura del freelancer, o trabajador autónomo, ha ganado una relevancia significativa en el mercado laboral español en los últimos años. Esta modalidad de trabajo ofrece flexibilidad y autonomía, pero también conlleva una serie de obligaciones fiscales que es crucial conocer para evitar sanciones y optimizar la gestión económica. Para que no sea tu caso, te contamos las principales responsabilidades fiscales que los freelancers deben cumplir en la Declaración de la Renta 2025 en España.
Alta en Hacienda y Seguridad Social
Antes de iniciar cualquier actividad económica, es obligatorio darse de alta en Hacienda mediante la presentación del modelo 037. Este trámite es indispensable incluso si la actividad es esporádica o secundaria. Al registrarse, se debe especificar la actividad económica a realizar, según los epígrafes del Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE), y el régimen fiscal aplicable, generalmente IVA e IRPF.
Además, es necesario inscribirse en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social. Esta afiliación implica el pago mensual de una cuota, cuyo importe varía en función de la base de cotización elegida y otras circunstancias personales.
Declaración y pago del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)
Los freelancers están obligados a declarar y pagar el IRPF, que grava los ingresos obtenidos por su actividad económica. Esta obligación se materializa en la presentación de la declaración anual de la renta, donde se deben incluir todos los ingresos y gastos relacionados con la actividad. Además, si los ingresos superan ciertos límites, es obligatorio realizar pagos fraccionados trimestrales a través del modelo 130, en los que se estima y abona un porcentaje de los ingresos a Hacienda.
Declaración y pago del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
El IVA es un impuesto indirecto que grava la venta de productos y servicios. En general, los freelancers deben aplicar un tipo impositivo del 21% en sus facturas, aunque existen excepciones dependiendo de la naturaleza del servicio prestado. Este impuesto se liquida trimestralmente mediante el modelo 303, donde se declara el IVA repercutido a los clientes y el IVA soportado en las compras relacionadas con la actividad. Eso sí, hay sectores que no aplican IVA, como aquellos que giran en torno a la propiedad intelectual.
Régimen de estimación directa simplificada
La mayoría de los freelancers tributan bajo el régimen de estimación directa simplificada, aplicable a aquellos cuya facturación anual no supera los 600.000 euros. En este régimen, se declaran los ingresos reales y se deducen los gastos necesarios para la actividad, siempre que estén debidamente justificados y registrados.
Obligaciones formales y contables
Es fundamental llevar una contabilidad ordenada y actualizada que refleje fielmente la situación económica de la actividad. Esto incluye la emisión de facturas por todos los servicios prestados, la conservación de justificantes de gastos y la llevanza de libros registros de ingresos y gastos. Además, es obligatorio presentar otras declaraciones informativas, como el modelo 347, que recoge las operaciones con terceros que superen los 3.005,06 euros anuales.
Sanciones por incumplimiento
El incumplimiento de las obligaciones fiscales puede acarrear sanciones económicas significativas. Por ejemplo, no presentar el Modelo 720, una declaración informativa sobre bienes y derechos situados en el extranjero valorados en más de 50.000 euros, puede conllevar multas de hasta 20.000 euros. Además, Hacienda ha intensificado la vigilancia sobre aquellos contribuyentes que muestran un alto nivel de vida pero declaran bajos ingresos fiscales o mínimos patrimoniales, utilizando herramientas como las redes sociales para detectar posibles fraudes fiscales.
En definitiva, y dada la complejidad del sistema fiscal español y las constantes actualizaciones de las normativas, se recomienda a los freelancers contar con el asesoramiento de profesionales especializados en materia fiscal. Esto garantizará el cumplimiento de todas las obligaciones fiscales y permitirá optimizar la carga impositiva dentro de los márgenes legales.