Cómo es el 'Oso de agua' y por qué es considerado como el animal inmortal

Su caminar recuerda al de los osos, motivo por el que recibe este nombre
El animal más feliz del mundo
MadridEl mundo animal es de lo más interesante porque nunca deja de sorprender. Cuando parece que ya se conocen las especies más curiosas, un pez diablo negro surge de las profundidades y muere en la superficie para tristeza de todos, o el ajolote vive un momento de fama máxima cuando todo el mundo descubre lo mono que es, algo muy similar a lo que sucede con el oso de agua, nombre con el que se conoce popularmente a los tardígrados, que impactan por su aspecto, pero también por sus características.
Considerado como prácticamente inmortal, para poder verlo es necesario un microscopio, pero su curioso aspecto hace que el esfuerzo merezca la pena. Su caminar recuerda al de los osos, motivo por el que recibe este nombre, también por su aspecto, extrañamente adorable. Es su capacidad de resistir a condiciones extremas lo que les hace especiales y únicos y, a pesar de que fueron descritos por primera vez en el siglo XVIII, hace una década vivieron su momento máximo de fama, les dedicaron estatuas, aparecieron en canciones y pasaron a formar parte de la cultura pop.
Oso de agua, cómo es este animal ‘inmortal'
Está considerado como la especie más resistente del planeta porque, entre otras cosas, podría sobrevivir en el espacio, pero también podría estar años sin agua, a pesar de ser un animal que perfectamente sobrevive en aguas dulces o saladas. El hábitat de este pequeño ser invertebrado son los musgos, líquenes o helechos, pero podría sobrevivir también en la luna.
Son seres microscópicos, por lo que no son visibles a simple vista, aunque tampoco es necesario contar con un microscopio superavanzado para verlos. La primera descripción de estos seres data de 1773, gracias a las observaciones del zoólogo alemán Johann August Ephraim Goeze. Tienen ocho patas y un hocico tubular, son ovíparos, pero se dice de ellos que no tienen infancia, eclosionan del huevo ya formados, son iguales que de adultos, pero más pequeños.
Son capaces de sobrevivir a las condiciones más extremas, de calor y de frío, también a la deshidratación, pueden pasar décadas sin agua ni alimento, es gracias a eso que han sobrevivido a los grandes cambios climáticos y llevan sobre la Tierra unos 600 millones de años. Esto los ha convertido en objeto de estudio, los investigadores quieren entender los procesos que llevan a que esto suceda, y saber si esto puede ayudarnos a evolucionar en y mejorar.
No hace tanto se descubrió que esta capacidad de supervivencia, que les convierte en prácticamente inmortales, es gracias a una proteína que solo ellos producen. Esta les permite entrar en un estado de latencia, permiten una deshidratación casi completa en la que pueden permanecer años y, una vez rehidratados, pueden seguir con su vida como si nada hubiera pasado.
Se sabe mucho de ellos, pero es más lo que falta por descubrir, de hecho, en 2015 vivieron un repunte en su fama cuando se descubrió que una gran parte de su material genético provenía de otras especies. Son una (microscópica) caja de sorpresas.