El inesperado momento del rey Carlos III, entre risas, tocando una flauta con forma de zanahoria
El monarca ha sorprendido a todos al tocar una flauta con forma de zanahoria de la London Vegetable Orchestra
El instante no ha pasado desapercibido y no ha tardado en viralizarse en las redes sociales
Este episodio llega después de que Carlos III fuera hospitalizado debido a los efectos secundarios de su tratamiento contra el cáncer
Este pasado jueves 3 de abril, el rey Carlos III ha protagonizado un gracioso e inesperado momento durante un evento musical organizado en el castillo de Windsor.
El monarca ha sorprendido a todos al tocar una flauta con forma de zanahoria, un instrumento poco convencional utilizado por la London Vegetable Orchestra. La escena, que no ha tardado en hacerse viral, muestra a un Carlos III envuelto en risas mientras intenta interpretar una sencilla melodía.
El evento formaba parte de una iniciativa para promover la música comunitaria en Reino Unido. La London Vegetable Orchestra, conocida por fabricar instrumentos con hortalizas frescas, presentó su inusual repertorio ante el monarca. Tal y como se observa en el vídeo, intrigado por la tan peculiar iniciativa, el rey no dudó en probar uno de los instrumentos y tocar una flauta-zanahoria, generando aplausos y risas entre los presentes.
Las imágenes del momento han sido difundidas por diversos medios británicos y han provocado una oleada de comentarios en redes sociales. Algunos usuarios han destacado la espontaneidad del monarca, mientras que otros lo han considerado un gesto de cercanía y sencillez por parte del soberano. "Cosas que nunca pensaste ver", "Me encanta su maravilloso sentido del humor", se observa en X -antes Twitter-.
No es la primera vez que el rey muestra su sentido del humor y su lado menos convencional. Recordemos que, durante los ensayos de su coronación, bromeó con el príncipe Guillermo sobre sus "dedos de salchicha", comentario que quedó inmortalizado en un documental de la BBC y que no pasó desapercibido. Además, en una visita al Show de Flores de Sandringham, él y la reina Camilla no pudieron contener la risa al descubrir un pastel con la cara del monarca.
Este tipo de gestos, aunque sencillos, contribuyen a humanizar la imagen del monarca y a reforzar su conexión con el público, reflejando que, más allá de las formalidades y protocolos, la realeza también tiene momentos de espontaneidad y humor. La escena de la flauta de zanahoria, más allá de lo anecdótico, muestra a un rey dispuesto a participar en momentos cercanos, dejando a un lado su papel institucional.
Este episodio llega poco después de que Carlos III fuera dado de alta tras una breve hospitalización debido a los efectos secundarios temporales de su tratamiento contra el cáncer del que fue diagnosticado a principios del año pasado. Pese al estado del padre del príncipe Guillermo, el rey ha continuado con sus compromisos oficiales, demostrando su compromiso con la agenda real y manteniendo una actitud positiva.
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