El destino y los invitados cambian, pero las aventuras en 'Universo Calleja' continúan. En esta ocasión Jesús Calleja, acompañado de Laura Escanes, Santiago Segura y José Mota viajan hasta Egipto donde acumularan recuerdos en sus memorias que jamás podrán olvidar. Uno de ellos es su incursión nocturna en la cámara del rey situada a 43 metros de altura sobre la base de la pirámide de Keops, donde les espera Tito Vivas, un arqueólogo de fama mundial. "Nunca un programa de televisión empezó más históricamente que en este momento", anuncia el presentador.

En un espacio visualmente reducido, los invitados del programa suben por una empinada escalera hasta su destino: la cámara del rey. Una situación bastante claustrofóbica, por lo que Jesús Calleja advierte que si alguien se agobia solo tiene que avisar. Y ese aviso no tarda en llegar: José Mota está "blanquín como la camisa", tal y como señala el presentador. El aventurero trata de distraer al cómico explicando a sus invitados que están presenciando algo que se construyó hace 4.000 años.

Nuevamente, les avisa de que en la cámara habrá humedad y que tendrán que coger inspirar profundamente. "Este aire es enrarecido y te estropea los pulmones", señala Santiago Segura. Mientras, José Mota no consigue recuperarse. "Tienes un blanco nuclear", afirma Jesús Calleja, quien se da cuenta de que su amigo le está sugestionado con comentarios como "¿Aquí José no notas como que te estás mareando?".

El humorista bromea, pero en realidad no se encuentra en su mejor momento porque el poco espacio que hay entre él y el techo le está atosigando. Santiago Segura no ayuda, puesto que se ha percatado que en las paredes de aquel reducido espacio hay hongos que pueden intoxicar sus pulmones.

Las dimensiones no aumentan al entrar en la cámara del rey: tan solo mide 10 metros de largo por cinco de ancho. No obstante, la magnitud histórica de aquel lugar es inmensa.

Allí se encuentra esperándoles el arqueólogo Tito Vivas y el sarcófago vacío del faraón Keops. "La tumba fue saqueada y desapareció con todas las joyas y el oro", cuenta Jesús Calleja, "La momia estaba llena de oro, de joyas preciosas... Él se tenía que ir a la otra vida rodeado de sus riquezas", afirma. Según asegura el especialista, la pirámide fue encontrada tal cual con el sarcófago abierto y probablemente fueron los mismos constructores los autores del robo.

Santiago Segura siente curiosidad por saber si es posible que, a día de hoy, haya salas sin descubrir en las pirámides y sí, de hecho, están en una de ellas. "Siempre se ha dicho que esta pirámide tiene tres cámaras y la gran galería por la que hemos subido. Pero ahora hay en marcha un proyecto y hay unos astrofísicos que están midiendo el impacto de partículas subatómicas en la pirámide, de modo que, poniendo unos medidores han llegado a la conclusión de que hay cavidades en el interior de la pirámide que hasta ahora son desconocidos", confiesa Tito Vivas.

Jesús Calleja tiene una sorpresa más para Laura Escanes, Santiago Segura y José Mota: "Vamos a ir a una cámara del inframundo que no dejan entrar a nadie y en el que Tito nunca ha estado. Siendo uno de los egiptólogos más prestigiosos, nunca le dieron permiso".

Solo por eso, Segura le hace una oferta: "Entra tú primero y luego nos cuentas". A la influencer le da la sensación de que el humorista está asustado y decide llamarle "cagado". "Espero que no tengamos que lamentarnos", señala Mota, quien todavía continua recuperándose de su mareo. Pero al presentador no le vale ninguna excusa: "Vamos todos".

La temperatura y la humedad baja, pero esta incursión conlleva aún más riesgo y el presentador no quiere engañarles, por lo que decide mostrarles el complejo camino para que lo vean con sus propios ojos. "Juegas con la salud de las personas", asegura José Mota. Esta cámara subterránea se encuentra a 30 metros bajo la pirámide y la caída es tan vertiginosa que Santiago Segura ni se lo plantea: "Pero, ¿cómo vamos a bajar hasta ahí?". Los humoristas tienen muchas dudas si bajar o no, pero Laura Escanes no quiere perderse esta aventura.

Finalmente, todos deciden hacer esta incursión solo por el gran privilegio que supone y, tras muchos golpes en la cabeza y reptar entre las estrechas paredes, consiguen llegar a "la cámara del inframundo" tal y como lo define el presentador. Allí les esperaba el Tito Vivas, quien llevaba 45 años esperando este grandioso momento.

En la vuelta a la superficie, Jesús Calleja les hace una confesión a sus invitados: "Pensé que no bajabais. Laura sabía que bajaba, luego Mota tenía claro que bajabas pero Santiago pensaba que no y ahí está".