Investigadores del CSIC descubren una proteína clave para entender el origen del alzhéimer
Una proteína altera las conexiones neuronales al inicio de la enfermedad, cuando todavía no hay síntomas
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Investigadores del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CBM-CSIC-UAM), en colaboración con la Universidad Pablo de Olavide y la VU University Amsterdam han dado un importantísimo paso para entender el origen del alzhéimer. Podría estar en una proteína que altera las conexiones neuronales al inicio de la enfermedad, cuando todavía no hay síntomas. Saberlo puede ayudar, en el futuro, a la detección precoz.
El origen del alzhéimer sigue siendo un enigma. Hasta ahora se ha indagado mucho en una proteína, el amiloide, que se acumula en placas en el cerebro de los pacientes, pero ¿qué pasa antes? Estos científicos del CSIC han descubierto otra proteína.
La SFRP1 juega un papel importante. “Estudiar esta proteína era importante si su nivel era elevado y el paciente tenía alzhéimer y vimos era así”, señala Paola Boloventa, investigadora del Centro de Biología Molecular.
La SFRP1 puede alterar las conexiones cerebrales
Esa proteína puede alterar las conexiones cerebrales: “Se sabe que esta pérdida de conexiones ocurre muy temprano, antes de que la persona tenga síntomas”. Y esas alteraciones se van acumulando con el tiempo. “Después de varios meses que van aumentando paulatinamente, de repente pierden memoria”, explica Boloventa.
Los científicos ya saben cómo intervenir para quitarlo. “Si esta proteína la quitamos del medio con anticuerpos que pueden neutralizar su función, la patología mejora”.
Todo esto lo han comprobado en ratones. Falta saber si en humanos ocurre lo mismo, pero si ocurre, “podría ser un buen marcador para detección temprana”
Esto abre una nueva diana terapéutica en el alzhéimer que, al ser atacado por varios flancos, dicen, se estará más cerca de ganar la batalla.